En los próximos días comienzan las obras de construcción de la Escuela Secundaria Técnica que dependerá de la Universidad Nacional Arturo Jauretche. El proyecto responde a la creciente demanda de ingenieros y profesionales técnicos, y aspira a que los jóvenes de los barrios más humildes desarrollen vocaciones científicas como una apuesta de futuro. Según un estudio de la UNAJ, los sectores Químico (87,9 %) y Metalmecánico (64,2 %) presentan la mayor proporción de búsquedas de personal entre los sectores analizados.
En los últimos años se ha generado una creciente demanda de ingenieros como consecuencia de la necesidad de mano de obra calificada en los sectores productivos a nivel regional y nacional. Por este motivo, resulta de gran importancia el crecimiento de la matrícula para la formación en estudios técnicos superiores, ya sean terciarios o universitarios. Según diversas universidades nacionales (UBA, UNLP, UNC), la matrícula de inscriptos para las carreras de ingeniería creció en 2016 entre un 15 % y un 18% en todo el país, tendencia que en la Universidad Nacional Arturo Jauretche es cercana al 40 %.
Un estudio realizado por el Observatorio de Calificaciones Laborales (OCAL) de la Universidad Nacional Arturo Jauretche, referido a la demanda de calificaciones laborales en la región (Almirante Brown, Berazategui, Florencio Varela, Presidente Perón, Quilmes y San Vicente) remarca que en todos los sectores productivos se evidencia una activa búsqueda de personal calificado por parte de las empresas. Los sectores Químico (87,9 %) y Metalmecánico (64,2 %) presentan la mayor proporción de búsquedas de personal entre los sectores analizados. Y dentro de este grupo de distritos, Berazategui y Florencio Varela son los partidos donde mejor se produce la relación entre búsqueda e incorporación de personal calificado, con 96% de búsquedas exitosas.
En este contexto de creciente demanda del mercado laboral, la Universidad Nacional Arturo Jauretche construye la primer Escuela Secundaria Técnica Universitaria en Florencio Varela, un ambicioso proyecto que combina innovación y calidad educativa con inclusión y que ofrecerá a los jóvenes del Barrio San Francisco y alrededores la posibilidad de formarse en las áreas de química y electrónica. Las obras comenzarán en marzo y el proyecto implicará una inversión total de $ 58.387.404, financiado por la Secretaría de Políticas Universitarias (SPU), para la construcción del edificio escolar, dos laboratorios, un campo de deportes y un comedor, que suman una superficie cubierta de 5400 metros cuadrados.
Florencio Varela es un distrito densamente poblado que en la actualidad cuenta con cinco Escuelas Secundarias Técnicas, lo cual genera una demanda concreta de establecimientos educativos de nivel medio. En este sentido, la UNAJ propuso junto al municipio local, la creación de una Escuela Secundaria Técnica Universitaria en el barrio San Francisco, una zona de alta vulnerabilidad social y educativa y de alta demanda.
Propuesta educativa de innovación
El rector de la UNAJ, Lic. Ernesto Villanueva, remarcó la importancia de esta escuela para el territorio: “Por un lado, lo cierto es que hay decenas de colegios universitarios en todo el país. Muchas veces esos colegios han tenido más el sentido de formar elites y no tanto de convertirse en lugares de investigación, innovación, creación pedagógica y didáctica. Esto es, lugares de innovación tal que ayudaran al conjunto del sistema de colegios secundarios argentinos a mejorar su nivel de enseñanza. Nosotros optamos por esta segunda corriente y creo que es muy importante”.
“Por el otro – agregó- tiene la importancia de estar ubicado en territorio, en un barrio que prácticamente no tenía colegios secundarios, menos de educación técnica que requiere un equipamiento especial, profesores de ciertas características. Entonces, aquí se combina la idea de innovación, la idea de influencia sobre el sistema educativo con la idea de inclusión con mucha calidad”.
Características de la escuela
La nueva Escuela Secundaria Técnica Universitaria contará con dos orientaciones: química y electrónica. Para el ingreso tienen prioridad los aspirantes pertenecientes a la zona de influencia del colegio, y si hay sobredemanda, por sorteo, manteniendo un sistema de reserva de vacantes para mujeres, estudiantes con trayectorias interrumpidas u otros criterios de priorización que se definan.
Con respecto a la currícula, las clases se desarrollarán en Jornada extendida de 7 horas reloj, 35 horas semanales. Ofrecerá materias electivas y espacios de aprendizaje diversos en deportes, recreación, arte y otros en articulación con las actividades de la UNAJ y del Municipio. Asimismo, la propuesta curricular del proyecto busca dar protagonismo al enfoque de género; reforzar los espacios complementarios, de fortalecimiento y acompañamiento a los estudiantes; con una fuerte articulación con la Universidad en aspectos de asesoría, acompañamiento y generación de nuevos proyectos.
La escuela contará con un equipo de conducción y docente de tiempo completo para asistir a la matrícula, que para la escuela completa está prevista en 630 estudiantes en total (30 estudiantes por grupo) al finalizar la implementación de los 7 años.
