—Nota publicada el 20 de octubre de 2016—
Se realizó en la UNAJ la primera de las dos jornadas en homenaje al Dr. Ramón Carrillo, primer ministro de Salud de la Argentina, en el año del 60° aniversario de su muerte, que organizan el Centro de Política y Territorio y el Instituto de Ciencias de la Salud.
Participaron del panel que recordó la vida y la obra de quien fuera ministro del general Perón durante ocho años, el ex ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, el senador provincial Darío Díaz Pérez, la historiadora de la UBA Charo López Marsano y el vicerrector y director del Instituto de Ciencias de la Salud de la UNAJ, Arnaldo Medina.
Al cerrar el panel de oradores de esta primera jornada, Ginés González García, rescató “el testimonio brutal de vida, de compromiso y de pasión” que significaron “esos ocho años maravillosos que Carrillo comparte con Evita y que cambiaron la historia”.
“La historia de la salud, de la Argentina social y sanitaria, Carrillo la cambió definitivamente”, agregó González, antes de ofrecer una semblanza del Dr. Ramón Carrillo que lo llevó a preguntarse “¿Qué lo hizo dejar su exitosa carrera para meterse con pasión desenfrenada en la política, en la medicina sanitaria, la medicina de masas, la medicina de comunidades, la medicina social, la medicina de todos, el peronismo?”
Entre los muchos logros de su gestión al frente de la cartera sanitaria durante los dos primeros gobiernos peronistas, el ex embajador en Chile destacó la creación de 60 mil camas hospitalarias y la erradicación del paludismo. “Esos hospitales, todavía hoy, pese a estar mal mantenidos, mal conservados, son bastiones” porque “eran los mejores de la Argentina, no eran más los hospitales para pobres, de beneficencia”, subrayó Ginés.
“Sus ideales hicieron que, teniendo una vida asegurada, acometiera con tanta fuerza y con tanta pasión” su empresa transformadora.
Hacia el final de su intervención González García reflexionó acerca del lugar que ocupa Ramón Carrillo en la historia y en el futuro de nuestro país: “No podemos despilfarrar la historia, ni cambiarla, nosotros tenemos que usar la historia como la usan los países que tienen futuro, justamente como un mecanismo de construcción de futuro, y en ese sentido nosotros siempre usamos a Carrillo como una manera de construir futuro”, concluyó.
Antes, la historiadora y docente de la Universidad de Buenos Aires, Charo López Marsano, habló sobre la vida y la obra del padre el sanitarismo, a partir del trabajo de su autoría denominado “Ramón Carrillo, el negro”, editado por la UNAJ para la ocasión y distribuido entre los asistentes a la jornada.
El vicerrector de la UNAJ, Arnaldo Medina, destacó la trascendencia del ideario de Carrillo. “Más allá de que fue el mentor y organizador del primer ministerio de salud de nuestro país, el primer ministro de salud que acompañó en el primer gobierno y en gran parte del segundo, al general Perón y a Eva Perón, lo que trasciende es su ideario, que como matriz conceptual se proyecta hacia nuestros tiempos”.
Carrillo “no consideraba que la salud era un bien individual, propiedad de las personas sino que era propiedad de las familias y del Estado, que debían cuidarla para que los hombres puedan ser unidades productivas. Planteaba que no podía haber una política de salud sin política social, ni política social sin política económica”, destacó Medina.
También se refirió a la obra de Carrillo en los ocho años en que estuvo al frente de la cartera de salud como una “revolución de la capacidad instalada” que llevó de 60 mil a 120 mil las camas hospitalarias disponibles, como una forma de garantizar los derechos sociales de quienes hasta entonces los tenían negados.
Entre otros aportes de su legado Medina destacó su concepción del rol del estado como actor central, integrador y garante de derechos en el sistema de salud; así como el carácter precursor de su concepto de medicina social, y el de otros no menos importantes, por ejemplo la idea de área programática, o la de planificación en la gestión para la revolución sanitaria.
“Recordarlo no es solamente hacer un ejercicio de memoria sino hacerse cargo de problemas muy actuales como la fragmentación del sistema de salud, retomar la idea de la integración del sistema de salud no es otra cosa que trabajar en beneficio del pueblo, del bien común y de la inclusión social de todos los argentinos”, añadió.
Por su parte, el ex intendente de Lanús y actual senador provincial, Darío Díaz Pérez. Se refirió al Dr. Carrillo como “el líder, ideólogo, pensador, gestor del sanitarismo argentino” y como “el hombre que pudo y supo incluir a quienes como pueblo estaban alejadísimos del acceso al servicio de la salud”.
Asimismo contextualizó su aporte en el marco del primer peronismo “proceso político que la Argentina vivió como un proceso revolucionario y transformador. Un modelo inclusivo que privilegiaba a quienes no accedían a estos servicios y a cuidar su salud”.
“Un proceso de salud como el que nos enseña Carrillo se produce y se realiza en el marco de un proyecto político que incluya, que eleve, que distribuya”, aseguró Díaz Pérez, confrontando el legado del Dr. Carrillo con la realidad presente.
“Defenderlo a Carrillo es pelear por una transformaron política, defenderlo a Carrillo es pensar en los que están excluidos y defenderlo a Carrillo es pensar que en estos tiempos de viento en contra, implica tener gestos de valentía y atreverse a denunciar lo que no merece el pueblo argentino”, planteó.
El homenaje a Ramón Carrillo continúa el próximo miércoles 26 de octubre a las 16 hs. Horas con un panel integrado por: Daniel Godoy, coordinador del Instituto de Estudios de la Salud de ATE; Ernesto Salas, coordinador del Centro de Estudios Políticos Arturo Jauretche; y Vicente Ierace, coordinador de la materia Salud Pública, del Instituto de Ciencias de la Salud de la UNAJ.